miércoles, 25 de noviembre de 2009

Groupies celtas


Ro me acompañó al concierto de Carlos Nuñez, era el tercero para mi, el primero para ella. La última vez hubo cinco años entre conciertos y yo había cambiado tanto que mis impresiones de ese recital habían sido muy fuertes
Quizás exageré, pensé.
Quizás mi propia situación de cambio profundo personal estaba seguramente afectando mi capacidad para disfrutar las cosas buenas e inflándolas un poquito, así que calculé que tener compañía durante el recital me podría ayudar a contrastar mi propia experiencia con la de otro.

El recital fue excelente como siempre, la gente (bueno, obvio que yo incluida), se emocionaba y bailaba con todas las ganas.
La vi bailar a Ro.. nunca la habia visto bailar a Ro.

"Tenías razón, me dijo, la música en vivo es otra cosa"

Si bien esta vez no me pegó tan fuerte como la anterior (también sólo habia pasado un año entre conciertos, lo tendría fresco aún), pude ver que mis impresiones no estaban alejadas de la realidad. Realmente su música en vivo tiene la capacidad de resonar en algún nivel con la gente, sacandoles lo mejor en ese momento y basicamente provocando una saturación de endorfinas, una especie de sugar rush. La gente salió del teatro con las palmas coloradas de aplaudir y todos, absolutamente todos sonreían.

Nos quedamos esperando con un grupo de gente afuera del teatro a que Carlos saliera. Allí terminamos charlando con una chica que se había venido junto con tres amigos especialmente de Rosario para ir al concierto. Ellos tenían su propio grupo de música celta. Era la una de la mañana de un jueves, todavía tenía que tomar el micro de vuelta y estar en pie temprano para ir a laburar.
No le importaba para nada, valia la pena absolutamente, decía.

Uno de sus amigos había quedado backstage porque había sido invitado al escenario a bailar, de pronto, al demostrar tremendas habilidades para el zapateo irlandés desde la segunda fila.
"Me lo llevo", dijo Carlos en medio de una canción.
Los rosarinos fueron invitados a acompañar a su amigo, nosotras seguimos esperando, intercambiando opiniones con otras personas, preguntandonos por qué había dos pibes con remeras de Obama (¿será lo nuevo in palermitano?), y disfrutando del clima alegre generalizado.

Al rato (buen rato), salió Carlos y se puso a saludar a todo el mundo demostrando macanudez por sobre mis expectativas. La chica rosarina me habia comentado que estuvo sentada al lado de Eduardo Blanco, que lo conocía. "No sabés lo buen tipo que es", le habia dicho. Es que alguien que moviliza tan positivamente a la gente no podía ser mal tipo, reflexionabamos. Claro que ...puede fallar.

No falló.


Charló con todo el mundo, preguntaba nombre, localidades y si nos había gustado el concierto. A los que le preguntaban dónde conseguír instrumentos, facilitaba información con muy buena voluntad mientras firmaba cd´s, incluido el de mi amiga (con corazoncitos).

"Qué cagada que me olvidé el puto cd"
, le comenté a Ro. Carlos se dio vuelta y empiezó a dibujar en mi hombro. Un parte mia se reía de lo inesperado, otra se sentía medio boba si me estaban firmando encima. Pero no firmó, dibujó un pentagrama.


Y nos sacamos fotos.


Ro y yo nos tomamos el 152 con sonrisas de oreja a oreja.


Brasil

Carlos Nuñez | MySpace Music Videos

1 comentario:

annayra dijo...

SISI la grupiés es lo MEJOR! Cuando todo tu adentro se mueve con la musica, la banda, la gente, las sillas, las luces y todo es AAAAAREGHHHHHHHHHH!!!!!!!!!!

GROUPIE DE POR VIDA!!!! (Buscando bajista para banda, si saben algo chiflen. Cita textual "pero qeu sea musico, no que "toque como tal o cual")