miércoles, 19 de noviembre de 2008

Recital de Carlos Núñez


Estoy casi casi sin palabras..


La música de Carlos la conocí de pedo hace ya casi diez años. Caminaba por Cabildo buscando una disquería chiquita para comprar un cd de Yo Yo Ma tocando a Piazzolla y cuando entré escuché una música maravillosa. Después de rebotar entre varios compilados y cosas supuestamente celta, finalmente había encontrado lo posta posta. Automáticamente le pregunté al flaco del mostrador qué era eso, y él me mostró un cd con una foto en primer plano cortado horriblemente, con un aire a cd de Luis Miguel mal y me dijo Carlos Núñez


Y yo dije: me lo llevo


Poco tiempo después, enamorada de su música me enteré que había estado en el país. Y que en la conferencia de prensa le habían robado los instrumentos, que sin importar reclamos de su valor emotivo y de figuras varias, nunca aparecieron.


Y me dije: No vuelve nunca más


Me equivoqué.


Una vez más, de pedo, al pasar con un bondi por el Auditorio Belgrano vi fugazmente un cartel que anunciaba recital de Carlos, sólo dos funciones agotadas. Al poco tiempo se agregó una tercera fecha y a esa fui.


Magia.


Hasta recuerdo que era su segundo recital al hilo y se disclupó porque con la diferencia horaria para él eran las cuatro de la mañana. Pero no importó, él puso todo y un poquito más. La gente deliraba, muchos no lo conocían y habían ido a escuchar simplemente a alguien que tocaba música celta, pero no se esperaban las fusiones maravillosas, el ritmo increíble y una energía aparentemente inagotable.


Toda la gente de pié bailando.


Una ronda gigante del público que paseaba por el escenario mientras él y su banda tocaban. Y la locura con el cierre de The Raggle Taggle Gipsy


Cinco años pasaron, mucho mucho tiempo para que volviera. Y como mi relación con su música evidentemente está cruzada por el azar, pasando con un colectivo vi, fugazmente, un cartel mal pegado y medio tapado en algo que parecía una terminal electrica.


Vi Carlos, una foto borrosa y una única fecha.


Y conseguí entrada.



Una vez más la magia total, lo que moviliza esta bestia cuando toca es poco transmisible con palabras, hay que experimentarlo. Sorpresas, temas que no conocía, banda de sonido de Mar adentro y una película del estudio de Miyazaki. La gente bailando y saltando en el teatro, la ronda y el cierre, más un bis programado y uno demandado.


Volvé más seguido Carlos.



Como muestra muy pero muy chiquita, dejo un video de una presentación junto a The Chieftains

Otro más, de yapa. El tipo es un animal tocando, cuando empezó el recital caminó desde la entrada hasta el escenario tocando la flauta, siendo él tan chiquito no sabía si er aun duende o una versión en carne y hueso del Flautista de Hamelin:



Sitio oficial

Muy buena review de su concierto en la Argentina

4 comentarios:

Anónimo dijo...

No dudo de la habilidad de Nuñez como músico. Pero la gaita es el instrumento con el timbre más feo que he oído en mi vida. Y me apropio de lo expresado por Alberdi sobre la guitarra para decirlo sobre la gaita: "Cuesta mucho determinar al mejor de los instrumentos, pero no cuesta nada designar el peor (...) ¿Por qué no estamos libres de este instrumento majadero?".

Veretis.

Anita dijo...

Jeje, entiendo Veri que la gaita no es un sonido tolerable para todos ;)

Alexander dijo...

Que.
Groso.
MAL.

Anita dijo...

Siii!, ¿viste?